Aquí estoy de nuevo, pasados los días, enfrente del ordenador, y he vuelto a lo de antes, me siento igual, aunque un poco mejor. No sé que es lo que me pasa, o simplemente quiero cerrar los ojos a eso que tanto me atormenta. Pero, ¿por qué? Debemos ser sinceros con nosotros mismos, pero y ¿si nos estamos equivocando, como remediarlo cuando quizás sea demasiado tarde?
No sé cómo actuar, cómo salir de esto... Necesito una cuerda que me eleve alto, al cielo, a ese cielo donde encontrar el motivo por el cual seguir, el motivo que me ayude a continuar.
A veces pensamos que tenemos las cosas superadas, pero en realidad las tenemos enterradas, y el día menos pensando resurgen... , pero ¿para qué?
Quiero desprenderme de algo, pero no sé de qué...
Ando perdida, el tiempo pasará y poco a poco iré encontrando una salida, aunque ahora no consiga mucho más... pero, ¿cuánto tendré que esperar?
2 comentarios:
Las equivocaciones no existen, toda decisión es buena y mala al tiempo, porque de todas sacas algo bueno, con todas sufres y de todas aprendes.
Nunca es demasiado tarde, las cosas suceden como y cuando tienen que suceder, ni antes ni después, no porque lo dictamine el destino, sino porque las cosas se van disponiendo según se desarrollan los acontecimientos, el truco consiste en anticiparse a ellos lo más posible, pero no siempre se puede controlar todo, así que asumelo con calma y comprensión.
Un beso y suerte
buen blog!!
veo que los temas que tocas tampoco difieren en mucho de los míos.
Quizás aquellas cosas que nos preocupan no son tan particulares como creíamos y son comunes para todos.
Respecto a la sinceridad para con nosotros mismos como comentas, no puedo evitar pensar cuando no somos conscientes de ello.Los prejuicios, esas conclusiones muchas veces precipitadas y condicionadas por nosotros mismos, no nos traen mas que ideas preconcevidas que no se ajustan en mucho a nuestra realidad.
-creo que de una realidad no se sale, todo tiene su razón de ser, mas bien creo que sobre la misma se construye.
se redirecciona!!!
Y es entonces cuando resurge aquello que se a enterrado, pues de las realidades se aprende, y si por una circunstancia algo se entierra, aparece mas tarde para que aceptemos o aprendamos de aquello que un día enterramos.
Creo que sentir que no se encuentra nuestro lugar, es bueno!!!
es nuestra alma inconformista la que se rebela.
Alguien dijo una vez , que para aprender hay que desaprender primero.
quizás se deba dejar de esperar a que sea el tiempo el que nos cambie, i empezar a actuar!!!!
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